La familia y/o amigos son integrados y la relación se desarrolla dentro de un entorno. Vive de esta etapa manteniendo el positivismo del enamoramiento pero concentrándote en la realidad.
A pesar de su amor, no pudieron navegar por las dificultades y finalmente tomaron caminos separados.
El amor se transforma para expresarse de manera más afectiva en forma de apoyo y entendimiento. Es regular que esta etapa sea important en muchas parejas, siendo la etapa clave que determine si la relación tiene futuro.
Esto trae cosas nuevas a la relación y evita el aburrimiento. En la colaboración se comprueba que se puede depender y confiar. Ya desarrollaron las destrezas de la convivencia, saben lo que piensa el otro y pueden resolver las diferencias.
Esta segunda fase llega en el periodo de los seis meses a los dos años. Durante esta etapa, la intensidad de las emociones se van desvaneciendo, por lo que la incertidumbre se hace presente, de un sentimiento de complete euforia y enamoramiento, llega una realidad más texturizada. Es entonces cuando comienzan a surgir mayores dudas o diferencias entre las personas.
A pesar de la conexión profundamente arraigada, es importante atravesar esta etapa con esfuerzos intencionales continuos para celebrar las cualidades únicas de tu pareja y la relación.
Si un integrante de la pareja tiene baja autoestima y se apoyaba en el otro, el establecer una identidad separada o paralela le puede asustar. La persona insegura puede tener miedo de que la pareja pase tiempo sola. Puede que una pareja evite que la otra pase tiempo sola por miedo a que se acabe la pareja. Surgen luchas de poder.
Es la etapa de las llamadas “mariposas en el estómagos”. En este momento sentimos deseos de permanecer la mayoría del tiempo con la persona amada. El deseo y la pasión están en su máximo esplendor, así como la creatividad para procurar sorprender a la pareja o pareja potencial.
Durante esta fase del amor, es común que muchas parejas tomen la decisión de vivir juntos/as o formar una familia.
La fase de compromiso aparece cuando han transcurrido más de dos años, al atravesar las etapas previas, han aprendido a resolver problemas, a expresar los sentimientos, a generar acuerdos, a trabajar personalmente y en conjunto, a reconocer los defectos de la otra persona, saber que el cambio en planes o acuerdos es ordinary, por lo que en la fase de compromiso se desarrollará un compromiso más profundo.
La cuarta etapa de una relación de pareja u otra de las fases del noviazgo, es considerar ya el amor que sienten el uno por el click for more info otro.
Sus nuevos amigos son divorciados y separados….y con ligues distintos cada fin de semana…también está atravesando la crisis de los 40 y tiene un cuadro de ansiedad por todo lo que os he contado….
En esta etapa destaca el sentirse enamorado/a, sin embargo, hay que tener en cuenta que durante los inicios de tu relación es importante tener claridad en los acuerdos que quieren tener como pareja, la construcción de los cimientos del vínculo deben ser hablados abiertamente para que la reciprocidad, el cariño y el respeto no pasen a segundo plano por la intensidad de las emociones.
Reconocer que somos individuos y que, por lo tanto, hay una frontera entre el Yo y el Tú. Un profundo respeto a la individualidad del otro Yo.